Con tanto sol, si te hablamos de calor igual sales huyendo.
Pero este calor es acogedor, como un arrullo que te tranquiliza y te hace estar cómoda, como una manta suave en el invierno.
Es el calor que te aporta un grupo de personas interesadas profundamente en tu historia de superación, en tus éxitos y en tus fracasos.
Algunas se reconocerán en esos éxitos y otras en esos fracasos, porque caminos similares han recorrido. Estés dónde estés en este momento, puedes unirte en el deseo común de «estar cada vez mejor», a paso a paso, día a día.
Te invitamos a la penúltima reunión del curso.
Pasa, la puerta está abierta.