Se acerca el 8M, un día para reivindicar justicia para las mujeres. Y es de justicia que no solo se visibilice, sino que se implanten instrumentos que permitan que esa igualdad sea real. En ese aspecto, ya tenemos nuestro “Protocolo para la prevención y actuación frente al acoso sexual y por razón de sexo en el ámbito laboral” aprobado y firmado. Seguimos subiendo los escalones para adecuarnos al formato normativo. Y que la mujer es protegida y cuidada en nuestra entidad ya hace años que es un hecho y “obras son amores y no buenas razones” que dice el refrán. Y una gran obra dirigida a mujeres y en la que ellas son las únicas protagonistas, es el Grupo de Apoyo Mutuo Entre Mujeres, que se reúnen cada quince días, para crecer juntas y apoyarse entre iguales. Las formaciones de Empoderamiento y Género, también son un gran apoyo para este colectivo.
En general, el 76% de las personas que atendemos son mujeres. Y es que la pobreza tiene nombre de mujer y son las que sufren más situaciones de vulnerabilidad y de exclusión. Especialmente en las familias monoparentales, que también son una buena parte de las que participan y se benefician de nuestra área de Familia e Infancia.
Así que más que “aprobado y firmado”, podríamos afirmar que se “ha constado” por escrito que en nuestra casa, las mujeres tienen el espacio, la importancia y la seguridad que se merecen.
