Hola! Soy Ana, voluntaria de la Asociación La Casa Grande.
Hace un tiempo decidí empezar esta aventura del voluntariado y esta ONG me abrió sus puertas de par en par para colaborar con ellos. Después del mal momento que vivimos, sentí que era el momento de dar mi apoyo a aquellas personas que más lo necesitan y qué mejor forma de hacerlo que a través de La Casa Grande. Las entidades, asociaciones y ONG han estado también al pie del cañón en los peores momentos, y actualmente con mascarillas y a lo loco, siguen funcionando y ofreciendo todo de sí; por ello decidí unirme a La Casa Grande.
Actualmente colaboro en el área de Primera Acogida, en la recepción de las personas, así como la atención telefónica. Desde allí, brindamos información de los distintos recursos de la asociación, tales como cursos de idiomas, talleres de formación para el empleo y orientación laboral. Desde Acogida también se orienta a las personas sobre otros recursos externos y ayudamos en la tramitación de los mismos.
Por otro lado, durante un tiempo he podido colaborar también en las actividades de refuerzo socio-educativo con niños y niñas, divirtiéndome con ellos cada tarde que he pasado con ellos.
En general, colaborar con La Casa Grande ha sido una de las mejores aventuras de mi vida, la cual repetiría sin duda. Además de colaborar, he podido aprender que cada persona es un mundo y lo bonito que es viajar a través de cada uno de ellos. El voluntariado me ha permitido asimismo crecer a nivel profesional, adquirir herramientas nuevas y reforzar otras. Gracias también a las compañeras y compañeros que me han mostrado su disponibilidad desde el primer día para ayudarme ante cualquier situación.
Lamentablemente mi camino toma otros rumbos y me gustaría animar a todas aquellas personas a dedicar tiempo a construir una sociedad igualitaria. ¡Sumando entre todas, podemos conseguirlo!