Todas nuestras actuaciones pretenden tener una repercusión y ser un apoyo al sistema familiar, puesto que es el principal sistema socializador del menor.
Desde el Programa de apoyo a las familias, orientamos a los padres sobre modelos educativos adecuados y pautas a seguir, apoyándoles en su rol de padres-educadores.
Las familias participantes en el programa presentan dificultades para cumplir su rol de educadores por diversos motivos. El equipo técnico de La Casa Grande evalúa las carencias y necesidades, les orienta unas veces mediante la presencia de los familiares en las sesiones de intervención, otras con la utilización de técnicas de refuerzo positivo, el uso de fichas y textos explicativos (recetas de disciplina). Por otro lado efectuamos una evaluación mediante instrumentos específicos de registro (economía de fichas) y llevamos a cabo una formación grupal de familias sobre pautas educativas, salud, alimentación…
Ofrecemos espacios de encuentro entre las familias fomentando el diálogo, conocimiento mutuo y que represente un apoyo.
La Casa Grande se esfuerza por adaptar su respuesta a las necesidades planteadas según los recursos existentes. Esta labor requiere creatividad y capacidad de adaptación.
El encuentro entre las familias hace que se establezcan vínculos de apoyo indispensables para alcanzar bienestar y desarrollo personal tanto de progenitores como de los menores.
Los logros del Programa en cifras
- Hemos atendido a 97 familias y se han llevado a cabo más de 500 entrevistas de seguimiento.
- 18 adolescentes han participado en actividades que fomentan la buena convivencia y cubren necesidades de ocio y all menos el 83% mejoró su rendimiento académico.
- Se han repartido 100 ayudas para equipamiento escolar (lápices, mochilas, libretas, chándal, ropa…) y 10 ayudas para alimentación e higiene de niños/as de 0-3 años.
- 17 personas han participado como voluntarias en este programa y muchas de ellas continúan actualmente.